La lluvia y el barro que anegó buena parte del recorrido del Rally Ciudad de Pozoblanco en su segunda etapa dificultó en gran medida la adaptación del piloto canario a su nuevo coche. La próxima cita del CERT será en su isla: Lanzarote.
El VI Rally Ciudad de Pozoblanco, segunda prueba del Campeonato de España de Rallies de Tierra, resultó ser el peor escenario posible para que Marcos González y Borja Odriozola empezaran su andadura con el Peugeot 208 N5. La lluvia y el barro que ésta trajo consigo en buena parte de los nueve tramos que tuvieron que disputar para alcanzar la meta final hizo muy difícil poder avanzar en su adaptación y en obtener unas conclusiones claras.
En este sentido, la decimosexta posición final no da una imagen fiel del verdadero potencial del vehículo que el equipo de González ha alquilado a RMC Motorsport. YHM Motorsport aprovechó cada paso por la asistencia para realizar ajustes en el N5 de acuerdo con las indicaciones del piloto de Distribuciones Viera. Sin embargo, las condiciones en que quedaron los tramos durante la mañana del sábado hacían imposible avanzar en ninguna dirección.
“El cuarto tramo fue el peor de mi vida. Después de unos cuantos sustos considerables, en cuarta velocidad y en plena recta el coche trompeó con la suerte de que no tocamos nada. Ya no importaba el ‘crono’, lo que importaba era seguir la carretera sin salirte”, explica el joven piloto lanzaroteño que en la primera pasada por esa misma especial ya había hecho algún trompo. Sin embargo, en el tercero ya se había acercado al ‘top ten’ de los mejores tiempos.
Tras esa tercera sección que calificó de “infernal”, en la siguiente trató de recuperar la confianza en otras dos variantes diferentes que se iban a repetir en la penúltima del rally. Haciendo ajustes en el coche e intentando recuperar el buen feeling con él, los tramos quinto y sexto fueron de transición. Casi un punto de inflexión, ya que en el octavo y penúltimo, el más largo del rally cordobés, obtenía el decimosexto mejor registro.
Con más confianza, González y Odriozola quisieron despedirse con un buen sabor de boca de este difícil rally y lo hicieron marcando el décimo mejor tiempo en el tramo final de Pozoblanco, de cuatro kilómetros. “Ha sido un rally de sensaciones contrapuestas”, explica el joven piloto del municipio conejero de Haría. En el shakedown y el primer tramo, el del viernes, el coche me gustó muchísimo. Íbamos en buena progresión, pero las dos pasadas por el tramo B fueron tan malas que nos hicieron perder toda la confianza. A partir de ahí empezamos un poco de cero y acabamos divirtiéndonos mucho. Es una pena que la lluvia haya complicado tanto el rally porque creo que lo podríamos haber aprovechado para llegar más preparados a Lanzarote”.
Tras Murcia y Andalucía, el Campeonato de España de Rallies de Tierra se dirige a Canarias para disputar a finales de este mes de abril el Rally Isla de Los Volcanes, la prueba con la que Lanzarote regresa al calendario del nacional y en el que Marcos González tiene muchísimas ilusiones puestas.