Desde el primer tramo y hasta su adiós definitivo en el penúltimo, su participación fue una sucesión de inconvenientes. La lluvia y el barro también complicaron esta segunda prueba del Campeonato de España de Rallies de Tierra.
Gustavo Sosa y Víctor Pérez no han podido terminar el VI Rally Ciudad de Pozoblanco. La participación de los canarios en esta nueva prueba del CERT ha sido una verdadera odisea en la que se ha cumplido aquello de que lo que mal empieza, mal acaba.
Porque para ellos, la primera de las dos citas andaluzas del nacional arrancó con la rotura del pedal del acelerador en la misma salida del tramo inaugural que se celebró en la tarde del viernes. Sin recorrer ni un solo metro en carrera, Sosa tenía que retirarse con la consiguiente penalización en tiempo para poder reengancharse en la etapa del sábado.
Esto obligó a recalibrar el objetivo de salir a ganar el rally en el Grupo N. Sin otro plan que sumar el mayor número de puntos y adaptar a su gusto el Mitsubishi Lancer Evo X de Calm Competició –el gran cambio a partir de esta prueba–, la aparición de la lluvia y abundante cantidad de barro hicieron aún más complicada la carrera cordobesa.
Incómodos y sin poder disfrutar por unas condiciones que eran iguales para todos, a partir del sexto tramo un problema con un latiguillo redujo drásticamente la efectividad de los frenos y, en el penúltimo tramo, a un rateo le siguió un pinchazo que acabó ocasionando la rotura de la bomba de un diferencial. Esa fue la puntilla a un fin de semana para olvidar. “En 18 años corriendo nunca había tenido un rally así. Han sido tantos los inconvenientes que ha llegado un momento en el que ya estábamos completamente desmoralizados. Este abandono llega para nosotros en un mal momento porque se produce después del tercer puesto de Lorca, pero no podemos bajar los brazos. La temporada es muy larga y ahora mismo, después de este fin de semana, sólo pienso en que la próxima prueba es en casa. No nos vamos a rendir y saldremos a por todas en Lanzarote”, ha declarado Gustavo Sosa al término del Rally Ciudad de Pozoblanco al que, en efecto, le seguirá en el calendario el Rally Isla de Los Volcanes a finales de mes.
Víctor Pérez tampoco daba crédito a la sucesión de infortunios. “De los 282 rallies en los que he participado, creo que en ninguno había vivido algo así. El lunes cumplo 27 años compitiendo y en pocas ocasiones he hecho mención a la mala suerte, pero esta vez es una de ellas. Sin duda, que se rompa el acelerador y que pinchemos inexplicablemente en recta con todo lo que eso trajo sólo se puede explicar así. Pero no vamos a bajar los brazos porque a los buenos marineros los hace la mar mala. Seguiremos luchando”, ha dicho.